Aceite de oliva virgen extra contra el cáncer de mama: así puede ayudarte
Cuando hablamos de salud, la magia no existe. Existen los buenos hábitos, los alimentos saludables, los modos de vida que más pueden ayudar a nuestro organismo y la suma de muchas pequeñas decisiones que nos dirigen hacia el camino correcto. Y, aunque por sus propiedades a veces parezca mágico, el aceite de oliva virgen extra contra el cáncer de mama es eso último: una piedra más en un castillo, que por sí misma no puede hacer nada pero que con un contexto apropiado puede ser de gran ayuda.
El cáncer de mama es, estadísticamente, el tumor maligno más común a nivel mundial. Esta enfermedad afecta sobre todo a las mujeres, aunque no exclusivamente, ya que alrededor de 1 de cada 100 casos lo sufren hombres. Detectado a tiempo, tiene más de un 90% de probabilidades de cura, lo que hace que además de ser el más frecuente, también sea el que porcentualmente menos víctimas deja en el camino. Y, aunque la aparición de un cáncer es incontrolable y azarosa, en el desarrollo de esta enfermedad también tienen su influencia los factores ambientales y, por supuesto, los malos hábitos.
Como cualquier otra enfermedad, el mejor tratamiento posible es la prevención. Y de ahí la importancia de la relación del aceite de oliva virgen extra contra el cáncer de mama, tal como se ha investigado en un estudio publicado por la prestigiosa cabecera médica European Journal of Clinical Nutrition. En esta investigación, el equipo científico quiso poner negro sobre blanco la relación entre los hábitos diarios y la aparición de esta enfermedad, y la conclusión es clara: el consumo habitual de AOVE, tanto cocinado como crudo, ayuda en la prevención del cáncer de mama.
Según las investigaciones, el hecho diferencial es el consumo del aceite de oliva virgen extra, ya que en el proceso de refinado se pierden muchas de sus propiedades beneficiosas para la salud. Un consumo moderado de AOVE en el contexto de una dieta saludable rica también en verduras, frutas y legumbres, tal como publica EJCN en este estudio llevado a cabo por Geicam, asociación dedicada a la investigación del cáncer de mama, puede suponer una reducción de hasta un 30% en el riesgo de desarrollar este tipo de tumor maligno.
El consumo de aceite de oliva virgen extra contra el cáncer de mama es, en definitiva, una piedra más en el castillo de nuestra salud. Junto con buenos alimentos y hábitos como el ejercicio físico moderado y recurrente constituyen la receta para una vida con probabilidades mucho más altas de tener una buena salud. De hecho, según otro estudio de Geicam, una vida sedentaria se asocia a un riesgo de desarrollo de la enfermedad hasta un 71% superior.
La importancia, como siempre, está en el equilibrio. El estudio refleja que el consumo moderado de AOVE de manera frecuente puede suponer hasta un 28% menos de probabilidades de sufrir cáncer de mama, pero siempre que se cumpla esa máxima: la de la moderación. El uso de unas pocas cucharadas al día, tanto en crudo como cocinado, ya sea en ensalada o con verduras, es el factor clave. En caso de excedernos, el problema es evidente, ya que la relación entre una elevada ingesta de calorías y el desarrollo de cáncer de mama es directamente proporcional.
El resumen es claro: el aceite de oliva virgen extra es salud siempre que sea un AOVE de calidad, en cantidad moderada y con un contexto de alimentación y hábitos saludables. Solo así le estaremos dando a nuestro organismo lo que necesita para mantenerse sano. Entra a nuestra tienda online y elige entre nuestra selección de aceites de oliva virgen extra de la máxima calidad.